CAMARONES EN ESCABECHE (O EN ADOBO DE CHILE ANCHO Y GUAJILLO)
Delicioso plato de camarones en un adobo hecho con chile ancho y chile guajillo. Especiado con pimienta, cominos, orégano y un clavito de olor, sin olvidar la hoja de laurel.
CAMARONES EN ESCABECHE 6 personas
Mi mamá llamaba a este plato así, aunque realmente deberían llamarse “camarones en adobo”. En escabeche tal vez por el vinagre que se le pone al final.
Ingredientes:
1 Kilo de camarones crudos pelados, con sal y gotas de limón
Aceite de oliva para freír
4 chiles ANCHOS grandes limpios desvenados sin semillas
4 chiles GUAJILLOS sin semillas
4 tomatitos huajes saladet (opcional, se puede hacer con puro chile ancho y guajillo)
4 ajos grandes asados
½ cebolla asada en gajos
1/2 cucharadita de cominos enteros asados
Pimienta negra recién molida al gusto
1 clavito de olor
Orégano seco al gusto (1/2 cucharadita)
2 o 3 hojas de laurel enteras
1 cebolla en rodajas
Vinagre de manzana o de vino tinto
Preparación:
· En una pequeña sartén asa la cebolla y ajos y ponlos en la licuadora con los chiles anchos y guajillos hervidos, agrega tambien el tomate asado o hervido opcional
· Asa también allí las especias: pimientas, clavo, cominos, a fuego muy bajito y moviéndolas constantemente para que no se quemen. Ponlos también en la licuadora si muele bien, si no, muélelos en el molcajete o mortero y bájalos a la licuadora con un poco de agua, y en última instancia usa los que venden en polvo, pero es mejor usar especias enteras recién molidas.
· Licua con un poco de agua para ayudar a la licuadora, muy poca.
· Mientras, en una cacerola gruesa o en una cazuela de barro (es ideal), calienta el aceite de oliva y sofríe los camarones sin que se doren (antes de freírlos sécalos muy bien con papel de cocina para que no suelten tanto líquido).
· Cuando estén sofritos, agrega la salsa licuada, sobre un colador, directo a la cazuela (si los chiles son nuevos y la licuadora muele bien, no la cueles) Revuelve, sazona con Knorr Suiza y sal y una pizca de azúcar. Añade las hojas de laurel, pruébalo y deja freír a fuego moderado hasta que el aceite salga a la superficie. Rectifica la sazón.
(Una pizca es lo que se toma con los dedos medio, índice y pulgar) Apaga el fuego.
· Al final, sácale las hojas de laurel y deséchalas. Coloca arriba de todo el guisado unas rodajas (rebanadas) de cebolla cubriéndolo y rocíala con vinagre de manzana o de vino tinto. Tápalo y déjalo reposar, el vapor ablandará la cebolla. Sírvelo con arroz blanco o rojo.
1 comentario :
deliciosos, gracias.
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